martes, 26 de febrero de 2013

Barcelona- Real Madrid


Barcelona- Real Madrid

Los jugadores ya están en el terreno de juego. Acaba de comenzar la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey  entre el Barcelona y el Real Madrid en el Camp Nou. Los dos equipos van a por todas porque se juegan mucho. Los aficionados blaugranas tiñen las gradas donde se resalta algún pegote blanco.

Nos esperan dos horas de tensión. Y después, según el resultado, horas de alegría y euforia, u horas de honda depresión. Así es el fútbol desatando pasiones. El mundo sigue girando, pero para los aficionados al fútbol, cuando se enfrentan el Barcelona y el Madrid, el mundo es el balón y, según que equipo marque, saltamos de emoción o morimos de indignación.

¿Qué tendrán estos partidos para ser tan especiales? Tradición, rivalidad, buen juego, etc. Sobre todo me quedo con el afán de los jugadores por conseguir la victoria. Es un partido de fútbol, disfrutemos con nuestro equipo y que gane el mejor.

Solo es un partido de fútbol, pero ¡qué partido!

lunes, 25 de febrero de 2013

Inteligentes bolígrafos



Inteligentes bolígrafos
Me acabo de enterar que en Alemania se acaba de inventar un bolígrafo que detecta los fallos gramaticales, los ortográficos y que está programado para reconocer los movimientos asociados a cada letra. El bolígrafo emitirá una vibración especial cuando detecte un error y, así, el usuario podrá reparar su incorrección. Creo que es un buen invento, sobre todo para los exámenes de lengua. Aunque no habrá sido tarea fácil diseñar el bolígrafo, pienso que el negocio está asegurado.
Eso sí, habrá que camuflarlo, porque no creo que los profesores lo dejen utilizar en las evaluaciones. Tendremos que usar nuestra fantasía particular para decorarlo y conseguir que pase por un bolígrafo vulgar. Lo ideal sería que su formato fuera como el de los demás bolígrafos y que externamente no se diferenciase en nada de ellos. Así los profesores no sospecharían.
Este invento, en realidad, ya lo tenemos con el ordenador. Cada vez que escribimos mal una palabra, la pantalla la subraya de rojo, y la cambiamos. No obstante, los bolígrafos siempre han sido mágicos, quizá por su tamaño, quizá porque nos ayudan a soñar sobre el papel, quizá porque pasan inadvertidos y, sobre todo, por las leyendas que los acompañan.
En las películas de espías hacen maravillas. Llevan chips del tamaño de alfileres que combinan cámaras y vídeos, por lo que pueden grabar y se convierten, así, en excelentes cámaras de vigilancia secreta. Otros contienen poderosas armas secretas e, incluso, algunos albergan un espació para veneno, por si el espía es descubierto y lo van a torturar.  
En fin, en la era de la tecnología, los bolígrafos también tenían que evolucionar. Estoy impaciente por notar sus vibraciones, aunque preferiría no sentirlas jamás. Indicaría que domino la ortografía y esto sí que sería un gran placer.



Ampliando el vocabulario



Ampliando el vocabulario


Una de las palabras que más se lee y se pronuncia en la actualidad es, sin duda, corrupción. En el diccionario de la Real Academia, su significado queda claro: “En las organizaciones, especialmente en las públicas, práctica consistente en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores.” Y si se usa tanto este término es porque, hoy en día, hay gestores muy famosos que han obtenido grandes beneficios económicos de un modo, parece ser, no muy legal.

Uno de estos gestores famosos es Bárcenas, antiguo tesorero del PP. Se descubrió que tenía veintidós millones de euros en varias cuentas de bancos suizos y por eso se le llevó ante el juez. En su declaración ha afirmado que llegó a tener hasta treinta millones de euros gracias a su “buen hacer” en los negocios. Él dice que sus asuntos son muy legales, que se ha dedicado a la compra-venta de obras de artes, de bienes inmobiliarios y a la bolsa. Pero Bárcenas no presenta las justificaciones para probar todas estas operaciones, por lo que el juez no lo ve claro y, además le acusa de no pagar el IRPF ni el impuesto de patrimonio del año 2007.

Otro de los famosos es Urdangarin, el yerno del Rey. También parece ser que ha ganado bastante dinero con sus negocios, pero el juez también sospecha de su legalidad y lo está investigando.

Cuando se celebren los juicios, escucharemos las sentencias y se dirá la última palabra. Mientras tanto, cada vez que se sucede un nuevo interrogatorio, ampliaremos nuestro vocabulario, con palabras como prevaricación,  corrupción  y otra serie de términos jurídicos, que no suenan a poesía, sino a un gran fraude a toda la sociedad.

domingo, 24 de febrero de 2013

Operación Puerto



 Operación Puerto

 

Con la Operación Puerto vamos de sorpresa en sorpresa. Mientras creíamos que nuestros deportistas no se dopaban jamás, se ha demostrado que existía una red de dopaje de lo más organizada. Disponía de todo: EPO, testosterona, anabolizantes, medicamentos variados y transfusiones sanguíneas.

Las investigaciones empezaron en 2006 y se descubrió que los clientes de la red eran todo tipo de deportistas: futbolistas, ciclistas, atletas... Pero como el dopaje no era delito en 2006, en España, únicamente se pensó que podría haber un delito contra la salud pública por parte de los responsables de la red. Como esto último no se pudo probar, se archivó el caso en 2007.

Ahora se ha vuelto abrir el caso y al empezar el juicio vamos conociendo, día a día, las verdaderas dimensiones de la red. Se habla de 200 bolsas de sangre preparadas para auto-transfusiones  por tanto, como mínimo, ese sería el número de deportistas implicados.

Han cambiado las leyes y si ahora se descubre el dopaje ya no queda impune entre los deportistas. Hoy día se hacen controles muy serios antes y después de cada  competición. Esto es muy necesario, porque ya no queremos sorprendernos más. 

La dimisión de Benedicto XVI


La dimisión de Benedicto XVI


Pronto empezará un nuevo cónclave para elegir Papa. Se reunirán los cardenales, rezarán e intercambiarán opiniones. Mientras tanto, todos esperaremos hasta que salga la fumata blanca y se anuncie: “Habemus Papa”.

La renuncia de Benedicto XVI ha sido una sorpresa mundial. Aunque en la historia de la Iglesia ya habían dimitido varios Papas por diferentes causas; en la actualidad, nadie se esperaba esa noticia. Pero, Su Santidad lo ha justificado: considera que le faltan fuerzas para dirigir la Iglesia católica. Todos lo hemos entendido,  porque ochenta y cinco son muchos años para atender el rumbo de los católicos durante el siglo XXI.

Aunque desde el siglo XV no había renunciado a su misión ningún Papa, Pío XII, en 1939, antes de su coronación, escribió una carta de dimisión por  si los nazis le hacían prisionero. Era previsor y no quería que la Iglesia se quedara sin Pontífice, como sucedió cuando Napoleón I hizo prisionero a Pío VII.

Ahora Benedicto XVI quiere retirarse y dedicarse a orar. Creo que con todos los problemas que tiene este mundo, nos vendrá bien que Su Santidad se dedique a rezar por nosotros. Seguro que así, empezará a irnos mejor.


miércoles, 23 de enero de 2013

Deudas y más deudas


Deudas y más deudas

¡Pobre Comunidad Valenciana! No hay día que pase que no aumente sus penas. Si aún no habíamos asimilado la deuda a las farmacias y los recortes en sanidad,  educación e investigación, ahora se pone de actualidad un nuevo desastre: el aval de los clubes de fútbol.

Tanto el Valencia como el Hércules y el Elche parece ser que no van a poder afrontar sus créditos y que, por tanto, se tendrá que hacer cargo de sus deudas su aval, que no es otro más que la Generalitat Valenciana, a través del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). Y la deuda no es cualquier cosa, por lo visto supera los cien millones de euros.

¿Cómo hemos podido llegar a este nivel de despropósitos?  Se ha gastado sin control en todo tipo de obras públicas, en todo tipo de eventos y el resultado es éste: una deuda acumulada que no para de crecer. ¿Y cómo podremos pagar todas nuestras deudas? Lo desconozco, pero estoy seguro que el fútbol con su garra y emoción nos ayudará a olvidar todas las penas.

Víctor Gutiérrez Santamaría

Vacas gordas, vacas flacas


Vacas gordas, vacas flacas

Estoy convencido de que el primero de los grandes economistas de la historia fue José, el hijo de Jacob, al interpretar los sueños del Faraón. Cuando dijo que las siete vacas gordas eran siete años de abundancia y que las siete vacas flacas eran siete años de malas cosechas, sin duda, estaba explicando los ciclos económicos con sus etapas de expansión y recesión. Y así, el Faraón aprendió la lección y se dedicó a ahorrar para los malos tiempos.

Han pasado muchos siglos, pero parece ser que nuestros políticos aún desconocen esta lección, a pesar de los muchos libros de economía publicados desde entonces. ¿Cómo se pudo olvidar que siempre se repite el mismo ciclo? ¿Cómo no vieron  que otra vez íbamos camino de hundirnos en otra crisis como la del veintinueve? Parece increíble, pero por lo visto los políticos no saben las reglas básicas de la economía, ni recuerdan tampoco el cuento de la cigarra y la hormiga.

Para poderse presentarse a las elecciones, debiera ser obligatorio aprobar un examen que incluyera temas de historia,  economía,  ética y sentido común. Quizá así conseguiríamos gobernantes prudentes y sensatos,  que se preocuparan de verdad por la marcha y el futuro del país. Mientras nuestros políticos no mejoren su formación, seguiremos de mal en peor y seguiremos padeciendo con asombro y desconcierto su falta de previsión y, sobre todo, sus escándalos y su corrupción.

Víctor Gutiérrez Santamaría